Vía Verde de la Val de Zafán y Delta del Ebro
De las Montañas a las Marismas del Delta del Ebro
El recorrido comienza en Bot, en el corazón de la comarca de la Tierra Alta, al norte de las montañas del Macizo de Els Ports. Seguiremos desde allí, la Vía Verde de la Val de Zafan, una antigua vía férrea que pretendía emular al Ebro, llevando el tren desde La Puebla de Híjar (Teruel) hasta al mar. A lo largo de este camino, con buen firme y tranquilo, podremos admirar la geología de la zona, con paisajes y formaciones rocosas únicas, que cuentan la historia del paso del tiempo.
Siguiendo el río Canaletas avanzaremos hasta las riberas del río Ebro próximas a Benifallet. Por la margen derecha del río Ebro, nos asomaremos para ver a la Azuda del Xerta, una impresionante obra de ingeniería hidráulica, cuyos orígenes se remontan a época islámica y que permite conducir el agua del Ebro a las huertas interiores del valle y el Delta. También divisaremos en el curso del río, varias islas fluviales y su rica vegetación de ribera, que son un buen ejemplo de sistemas naturales fluviales en este curso bajo del río.
Continuamos, atravesando las terrazas del río Ebro aprovechadas por numerosos cultivos de frutales y pequeños núcleos urbanos.
En la ciudad de Tortosa, tendremos ocasión de recorrer sus calles empedradas y sus monumentos centenarios. Y llegaremos a otra importante ciudad, Amposta, donde el Ebro se integra en su delta. Antes de llegar a esta población “puesta sobre el río”, cruzaremos el Ebro por el segundo puente colgante de hormigón del mundo, inspirado en el puente de Brooklyn en Nueva York.
Desde aquí, partiremos hacia los humedales del Delta del Ebro, un lugar de confluencia entre el medio continental y marino, de gran biodiversidad. Sus productivas tierras húmedas fueron siempre explotadas por las comunidades locales, pero a finales del siglo XIX, se ponen en marcha los cultivos de arroz, que actualmente ocupa un 65% del Delta. Consecuencia del desarrollo económico que generaba este cultivo, prosperan las poblaciones en el corazón del Delta, como Deltebre.
De camino al litoral y sus playas con dunas, conoceremos su historia geológica, sus características y singularidades hidrológicas, mientras recorreremos las extensas tierras planas de arrozales de paisaje cambiante según las estaciones.
Y llegaremos hasta las zonas designadas como Parque Natural, donde se encuentran las lagunas de Delta y salinas abandonadas, en las que nos detendremos para la observación de aves. Son un importante punto de descanso y alimentación para las aves migratorias, así como un área de cría y refugio durante el invierno. Aquí, pueden congregarse entre 50.000 y 100.000 individuos de unas 330 especies. En torno a estos lugares también conoceremos las singularidades de las comunidades vegetales naturales adaptadas a la salinidad.
Todo el recorrido se encuentra dentro de la Reserva de la Biosfera “Terres de L’Ebre”, declarada por la diversidad y conservación sus ecosistemas y su coexistencia con la población que convive con ellos.
Ruta de 2 días